Después de que el hombre -el primero de ellos (Adam) fue formado en la región de Edén 4200 años a. C. en lo que ahora es el territorio de lrak- fue destruido a causa del diluvio que sobrevino en la Tierra (esto sucedió en el 2460 años a. C.). La raza humana sobrevivió gracias a la vida de un hombre llamado Noé y su descendencia (Sem, Cam y Jafet); de los cuales provienen todos los pueblos, naciones y lenguas que existen en el mundo.

Dicha arca de donde surgió esa familia, se asentó en las cumbres de los montes de Ararát en Armenia; desde ese lugar se fueron diseminando por todo el orbe, tanto hombres como animales. Por tanto, es incorrecta la afirmación antropológica que el  origen del homo sapiens surgió del continente africano hace millones de años. 

De Sem provienen los pueblos llamados Semitas los cuales conforman al pueblo judío y árabe, y una prueba de ello es que ambos creen en un sólo Dios -Yahvé Eloha- con lo que pregonan de que Abraham es el padre de su cultura; y por tanto poseen su religión monoteísta y son muy orgullos de su procreación. Que es la enseñanza que les dejó como legado el padre Abram, hijo de Taré. 
Aunque Abram provenía de Ur de Caldea (una de las primeras urbes humanas que se construyeron en la antigüedad aproximadamente entre el 2300-2400 años a. C.), llena de las deidades y doctrinas politeístas que imperaban en el mundo desde ese entonces; había escuchado y aprendido de las enseñanzas de Sem, de su manera de vivir y su convivencia con Dios, el cual era su ascendiente; por lo que  más adelante abrazó sin problema la promesa y la fe en Yahvé Elohim.

De Cam, el hijo testarudo de Noé, provienen todos los pueblos del medio oriente y áfrica. Los cuales, por no seguir las enseñanzas de Noé -responsabilidad recaída en Cam- se convirtieron en pueblos politeístas y con tradiciones y costumbres ajenas e inmundas a Dios. El imperio de Egipto, los pueblos de la región de Canaán y Filistea provienen de esa raíz.

De Jafet provienen todas las culturas y pueblos Indo-europeos (incluidos los asíaticos) y por consiguiente también las civilizaciones de América. De éste Jafet, proviene toda cultura fuera de la musulmana y judía, la cual con el pasar del tiempo se fue pervirtiendo (olvidando las enseñanzas de Noé) hasta convertirse en civilizaciones politeístas y humanistas (de pensamiento helénico y oriental), alejadas por completo de Dios.  Los pueblos mesoamericanos también provienen de Jafet, los cuales por igual, estaban muy lejos de conocer al Dios verdadero y su enseñanza; porque además se alejaron geográficamente del pueblo de Dios (Israel). Estos hombres americanos  provienen de nómadas asiáticos que se aventuraron a conocer nuevas tierras por explotar (en busca de riquezas y recursos) y terminaron como pueblos independientes de Asia, con culturas, idiosincrasias, apariencia física e idiomas totalmente diferentes.

Toda esta diseminación humana sucedió antes del 2400 a. C. partiendo de la región montañosa de Ararát en Armenia, donde encalló el arca de Noé, hasta llegar a los confines del orbe a través de las eras.