EL VARÓN Y LA MUJER

Actualmente, con el estilo de vida tan voluble, acelerado y moderno, la vida puede ser, o más bien es, muy difícil y tensionante. Convierte a las relaciones matrimoniales en uniones muy tensas y dramáticas; lo cual se debe al veloz ritmo de vivir, al estrés de la vida y a las diferencias de pensamiento entre cónyugues. 

Cuando un hombre se siente lastimado, o tiene una mala percepción con respecto a su esposa, se retira emocionalmente y desarrolla una separación o lejanía entre ambos. 

Dicha separación, los lleva inconscientemente, a crear un sentimiento de rechazo por parte de ambos originando así un vacío en la relación; con lo que aparecerán muchos problemas matrimoniales, discusiones e incluso desembarcar en un divorcio.

Para evitar caer en esta "trampa" emocional, es necesario aceptar y conocer las diferencias existentes entre varón y mujer; deben también, aprender a trabajar y a crecer con paciencia y con amor.

Tu como varón, haz todo lo que esté al alcance de tu mano para aliviar la tensión en la vida de tu esposa, además debes aligerar la carga en el hogar.

De esta manera tu esposa será más receptiva hacia ti, y tu podrás tener una realización más satisfactoria y fructífera.

Recuerda siempre tener en mente lo que dice Dios por medio de Pablo en 1ra. de Corintios 13: 4-8 acerca del amor. Puede verse a veces una labor titánica o insalvable, pero un matrimonio sólido y estable siempre será lo mejor que te pueda pasar en tu vida. Además, toda congregación debe estar sostenida por matrimonios sólidos que sirvan en amor y en excelencia para un óptimo crecimiento.