Algo que viene sucediendo desde los comienzos de la civilización humana hasta nuestros días. El espíritu del error (por causa de la desconexión del espíritu del hombre con el Espíritu del Dios Trino), tergiversó el perfecto equilibrio que existió en Edén y en todo el Universo; para menospreciar así el gran valor que la mujer tiene para Yahvé Elohim; esto como parte del plan malévolo que puso en marcha satanás.
Por lo consiguiente, ahora, desde tiempos posteriores a la caída, el varón, ahora se menosprecia a sí mismo (se auto-desvaloriza sin siquiera saberlo) por causa de su violencia en contra de la mujer. Y esto lo hace en desconocimiento total de su raíz espiritual.
Lo cual sucedió como consecuencia de la caída de la raza humana en pecado, y este involucionó, por tanto, de un "ser supremo-divino" (como llegó a existir al principio de su creación en Jardín de Edén) para convertirse en el que ahora llamamos el (superior)"homo sapiens".
Pero esto trajo consigo, de generación tras generación, ese espíritu de "machismo" que tanto daña o violenta a la mujer, a la familia y a la sociedad. Causando así, una destrucción muy marcada, en la familia, y por tanto también, en la sociedad.
Ahora, en CristoJesús, debemos valorar y restituir a la mujer, en lo que siempre fue el designio del Padre, que ella llegara ser, junto con el hombre, una casa espiritual llena de Dones, talentos y sabiduría espirituales, para reinar junto con su esposo dentro de su hogar.
Por tanto varones, esforcémonos para que esto pueda llevarse a cabo.
¡AMEN!
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